Huelva, 24.05.15.- La familia de un vecino de la playa de La
Antilla, José Luis Danta Gil, ha conseguido que no le convoquen a votar
por primera vez desde que falleció en 1997, ya que desde ese año se le
ha convocado en cada cita electoral a pesar de todos los intentos
realizados para que no lo hiciesen.
Así lo ha explicado a Efe su hijo, José Luis Danta Rubio, que ha
señalado que “tras muchos intentos, y tras ver como durante 17 años le
han llamado a votar a pesar de estar muerto, por fin han atendido
nuestra petición y le han dado de baja en el registro de votantes”.
Según ha señalado, cada vez que llegaba una cita electoral “ya nos
tomábamos como una broma que lo convocaran a votar, pero era como una
broma de humor negro cuando llega a casa la tarjeta electoral de mi
padre”.
De hecho, en las elecciones andaluzas no recibieron la tarjeta
concreta, pero sí comprobaron en el censo electoral que su padre estaba
inscrito con el número 0300, con lo que a todos los efectos era una
persona con derecho a voto en esa cita.
Al Ayuntamiento lepero, concretamente, se le comunicó oficialmente el
3 de 1997 que había fallecido, pero su padre ha seguido constando como
votante oficial, e incluso su propia madre recibió la tarjeta censal
hasta siete años después de fallecer.
Su hijo sostiene que ha ido en numerosas ocasiones a distintas
administraciones a intentar solucionar este asunto, la última tras las
elecciones europeas de 2014, pero la situación no se normalizaba año
tras año, hasta que ha conseguido que, de cara a estas elecciones
municipales, no sea convocado a votar.
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