Modélica procesión. En medio de un auténtico mar de romeros, la Virgen del Rocío ha regresado a su santuario a las 11:50 horas, tras procesionar por las calles de la aldea durante más de ocho horas.
La Señora de Pentecostés ha visitado las 110 filiales que han acudido a rendirle pleitesía después de que a las 03:20 horas se produjese el esperado salto de la reja por parte de los almonteños, que la sacaron posteriormente a hombros.
El salto ha tenido lugar en esta ocasión más tarde que en años anteriores. Tal vez por ello, los almonteños tardaron también menos tiempo que en otras ocasiones en recorrer el trayecto que separa al altar de la puerta de la basílica para sacar a su Patrona.
Dentro del fervor habitual en estos actos, la procesión de este año se ha desarrollado con más calma que en los últimos años. Así, el trono ha caído al suelo menos veces que en otros años.
Tal vez la rotura de uno de los varales del paso de la Virgen en la procesión del año pasado ha supuesto un punto de inflexión y ha desembocado en la calma que se ha respirado este año.
De hecho, los almonteños realizaron un pasillo para permitir que la Virgen dejara su ermita con "más tranquilidad".
Así lo considera también el presidente de la Hermandad Matriz de Almonte, Juan Ignacio Reales.
Mientras tanto, las crónicas cuentan que los efectivos sanitarios del 061 desplazados para la atención de los romeros desde el pasado día 22 a la aldea almonteña han realizado un total de 1.612 asistencias. La actividad de los servicios de emergencias se ha concentrado principalmente en el fin de semana y en especial durante el domingo y la noche del lunes, registrándose 600 personas atendidas.
La Señora de Pentecostés ha visitado las 110 filiales que han acudido a rendirle pleitesía después de que a las 03:20 horas se produjese el esperado salto de la reja por parte de los almonteños, que la sacaron posteriormente a hombros.
El salto ha tenido lugar en esta ocasión más tarde que en años anteriores. Tal vez por ello, los almonteños tardaron también menos tiempo que en otras ocasiones en recorrer el trayecto que separa al altar de la puerta de la basílica para sacar a su Patrona.
Dentro del fervor habitual en estos actos, la procesión de este año se ha desarrollado con más calma que en los últimos años. Así, el trono ha caído al suelo menos veces que en otros años.
Tal vez la rotura de uno de los varales del paso de la Virgen en la procesión del año pasado ha supuesto un punto de inflexión y ha desembocado en la calma que se ha respirado este año.
De hecho, los almonteños realizaron un pasillo para permitir que la Virgen dejara su ermita con "más tranquilidad".
Así lo considera también el presidente de la Hermandad Matriz de Almonte, Juan Ignacio Reales.
Mientras tanto, las crónicas cuentan que los efectivos sanitarios del 061 desplazados para la atención de los romeros desde el pasado día 22 a la aldea almonteña han realizado un total de 1.612 asistencias. La actividad de los servicios de emergencias se ha concentrado principalmente en el fin de semana y en especial durante el domingo y la noche del lunes, registrándose 600 personas atendidas.
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