Huelva, 11.10.18.- El hasta ahora portavoz de IU en el Ayuntamiento de Almonte, Daniel Martínez, ha presentado la dimisión de dicho cargo y ha anunciado que tampoco seguirá como coordinador local de la formación.
En conversación telefónica con esta Redacción, ha señalado que los motivos que le han llevado a tomar dichas decisiones son estrictamente laborales, ya que al residir en Almería por motivos laborales le es “imposible” seguir ocupando dichos cargos.
Esta situación sería la causa, además, de que no vaya a estar ni siquiera en el pleno donde se abordará su renuncia como concejal.
Martínez también ha anunciado que no concurrirá a las próximas elecciones locales. “Siempre he dicho que dos mandatos son suficientes”, explica al tiempo que recuerda que se presentó a los comicios de 2011, donde IU logró dos concejales, y a los de 2015.
La marcha de Martínez deja a Izquierda Unida en una delicada situación, según reconocen fuentes de la formación en la localidad, a siete meses de las próximas elecciones municipales.
La vuelta de Francisco Bella
Por otro lado, Martínez se ha referido a la vuelta del exsocialista Francisco Bella tras permanecer 20 años ocupando cargos de alcalde y senador, entre otros. Según ha destacado, el partido Ilusiona se ha creado alrededor del “ego personal” de un político “que no asume que su tiempo ya pasó”.
A juicio de Martínez, la citada formación se ha creado “a imagen y semejanza” del ex alcalde de la localidad.
Precisamente, la Fiscalía de Medio Ambiente llevará a juicio a los dos últimos ex alcaldes de Almonte, José Antonio Iglesias y Francisco Bella, por el llamado “robo de agua” de Doñana.
Después de exculpar al que fuera consejero de Medio Ambiente y ministro del ramo, Luis Planas, el juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de La Palma ha abierto juicio oral contra los dos últimos ex alcaldes de Almonte.
El ex popular Jose Antonio Domínguez Iglesias y el socialista a la sazón, actualmente en Ilusiona, Paco Bella, tendrán que declarar por el llamado robo de agua de Doñana.
Según la acusación presentada por la Fiscalía de Medio Ambiente, Domínguez Iglesias y Bella eran “conocedores de la existencia de autorización para la extracción del agua”. En el informe presentado por la fiscalía se afirma que su posicionamiento permitió que “continuase la actividad de extracción ilegal del agua y daño de los acuíferos”.
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