La decisión de José Antonio Griñán de excluir al sector crítico fuera de la nueva Ejecutiva que ha conformado en el congreso regional celebrado este fin de semana ha tenido como efecto más inmediato el hecho de que la nueva dirección haya contado sólo con el 65,8% de los votos.
Griñán ha perdido apoyo por días. Si en la jornada inaugural del congreso el informe de gestión obtuvo un respaldo casi unánime, en el cierre más del 34% de los delegados votó en su contra, frente al 29% que no apoyó el sábado su candidatura al máximo cargo orgánico. La ejecutiva regional recibió el respaldo del 65,82%, en tanto que 174 delegados, un 31,46% votaron en blanco y un 2% de los votos quedó invalidado.
Las fuerzas de ambas facciones también se midieron en otros órganos de dirección de menor importancia. En dos de ellos, el comité federal y el comité director, la lista alternativa estuvo liderada por dos militantes del PSOE de Jaén. Felipe López, ex presidente de la Diputación jiennense, consiguió casi un 34% de apoyo y 33 delegados, en tanto que Luciano Alonso, afín a Griñán, obtuvo 67. En el comité federal, el ex consejero Francisco Vallejo encabezó una candidatura que obtuvo 7 representantes, por los 14 de Fernando Rodríguez. Las listas de oficialistas y críticos presentadas para las comisiones de ética y cuentas obtuvieron un porcentaje similar de votos.
La delegados abandonaron el congreso con la vista puesta en sus respectivos congresos provinciales. Previsiblemente, el resultado del congreso regional se repetirá en Sevilla. Los oficialistas ganarán de calle en todas las provincias excepto en Cádiz, donde las fuerzas están igualadas, y, por supuesto, en Jaén, donde son minoritarios. Precisamente, Griñán ha reprochado durante el congreso a la dirección jiennense que pida integración en la ejecutiva regional mientras margina a los disidentes en sus propios órganos de dirección.
Griñán ha perdido apoyo por días. Si en la jornada inaugural del congreso el informe de gestión obtuvo un respaldo casi unánime, en el cierre más del 34% de los delegados votó en su contra, frente al 29% que no apoyó el sábado su candidatura al máximo cargo orgánico. La ejecutiva regional recibió el respaldo del 65,82%, en tanto que 174 delegados, un 31,46% votaron en blanco y un 2% de los votos quedó invalidado.
Las fuerzas de ambas facciones también se midieron en otros órganos de dirección de menor importancia. En dos de ellos, el comité federal y el comité director, la lista alternativa estuvo liderada por dos militantes del PSOE de Jaén. Felipe López, ex presidente de la Diputación jiennense, consiguió casi un 34% de apoyo y 33 delegados, en tanto que Luciano Alonso, afín a Griñán, obtuvo 67. En el comité federal, el ex consejero Francisco Vallejo encabezó una candidatura que obtuvo 7 representantes, por los 14 de Fernando Rodríguez. Las listas de oficialistas y críticos presentadas para las comisiones de ética y cuentas obtuvieron un porcentaje similar de votos.
La delegados abandonaron el congreso con la vista puesta en sus respectivos congresos provinciales. Previsiblemente, el resultado del congreso regional se repetirá en Sevilla. Los oficialistas ganarán de calle en todas las provincias excepto en Cádiz, donde las fuerzas están igualadas, y, por supuesto, en Jaén, donde son minoritarios. Precisamente, Griñán ha reprochado durante el congreso a la dirección jiennense que pida integración en la ejecutiva regional mientras margina a los disidentes en sus propios órganos de dirección.
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