La llamada de Dios

A las puertas de la lonja de Isla Cristina, cientos de hombres y mujeres volvieron a reunirse para rendir pleitesía a la Virgen del Carmen. La misa de acción de gracias a la Patrona de los marineros congregó a representantes de diversos sectores sociales de la localidad así como una amplia representación de la Corporación municipal, que encabezó la alcaldesa, María Luisa Faneca, y su primer teniente de alcalde, Francisco Zamudio.
La ceremonia fue oficiada por el párroco Sebastián Martín Macías, quien tuvo una ocurrencia que fue recibida con la carcajada generalizada por parte de los fieles. Fue cuando, en medio de la homilía, sonó el móvil de alguno de los asistentes y el sacerdote, ni corto ni perezoso, espetó que sería 'la llamada de Diós'.
La cosa, por aquello de que lo poco agrada y lo mucho empalaga, dejó de tener gracia cuando el móvil volvió a sonar minutos después y ya, en este caso, el cura informó al propietario o propietaria del teléfono que para apagarlo debía presionar la tecla roja. Fue, sin duda, como dijo un compañero, la anécdota.