Gibraleón, 17.11.14.- Como cada año por estas fechas, las tabernas y bodegas de Gibraleón comienzan a registrar el trasiego que conlleva la temporada de mosto. La llegada de los primeros fríos comienza con la degustación del vino nuevo tras la última cosecha y la localidad se convierte en punto de peregrinación para visitantes llegados de cualquier parte de la provincia, especialmente de la capital, dada su cercanía.
Como suele ser habitual en cada local, sus chimeneas están dispuestas para que cada cual ponga sobre las parrillas la carne que lleve así como otros manjares. Del resto se ocupa la taberna o la bodega elegida: ensalada, papas aliñás, garbanzos con bacalao y, lógicamente, mosto.
Hasta la entrada del nuevo año, cada fin de semana, cientos de arrobas del popular caldo atraerán a cientos de personas en lo que se ha convertido para muchos en una tradición. “Venimos en reunión los amigos y sus parejas desde hace tiempo. Cada fin de semana que venimos nos turnamos para ver quién conduce y quién no” cuenta Carlos, vecino de Huelva. “Para nosotros, el mejor día para venir es el sábado, al mediodía, traemos nuestras chuletitas y tocinitos para ponerlos en la candela y eso con mosto está para chuparse los dedos”, añade.
De su misma opinión es Candela, para la que existen varias tabernas favoritas, aunque ella prefiere que el visitante las conozca por sí mismo. “Un año nos dá por una –precisa- y otros por otra, cada cual tiene su predilección”.
En estas tabernas, frecuentadas hasta hace unos años solo por hombres, se despacha el vasito, el ‘cacharrito’, la jarra o la botella para llevar el mosto, que se encuentra en la bota, en el barril ó ‘bocoy’.
Algunos de los locales que ofrecen mosto son ‘Gazpacho’, ‘Avíate’, ‘Maroto’, ‘El Clarito’, ‘El español’, ‘Lechones’, ‘Marzo’, ‘Portugués Tolón’ o ‘San Isidro´(antigua taberna ‘Viña’), entre otras. Todas reciben el nombre del apodo por el que se conoce a su respectivo propietario.
De forma paralela, el colectivo cultural Olontia organiza una cita que se ha convertido en un atractivo no solo gastronómico sino también cultural: el Mostojazz. Se trata de música en directo mientras lo asistentes degustan el mosto y aquellos alimentos que lleven a la taberna en la que se desarrolla el evento. En este caso, la cita tendrá lugar a partir de las 13.00 horas en la taberna El Clarito y contará con el concierto de Flazz Trío.
Y antes de que finalice el año, el Ayuntamiento olontense llevará a cabo la Fiesta del Mosto, el Aceite y la Tostá, en la que el pasado año 2013 fueron degustadas más de 20 arrobas de dicho vino. En aquel momento, el alcalde, José Ramón Gómez Cueli, reconoció que el mosto, además del aceite de oliva que produce la Cooperativa Nuestra Señora de la Oliva –premiado varias veces a nivel nacional y provincial-, se ha convertido en un importante reclamo para el visitante que acude a la localidad en estas fechas.
El mosto olontense, dado su poder de convocatoria, se ha consolidado como uno de los más distinguidos de la provincia.
(Fotos: Luis Jurado y G.M.)
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