jueves, 12 de febrero de 2015

La Higuerita cumple 100 años de vida



Isla Cristina, 12.02.15.- El periódico La Higuerita de Isla cristina cumplirá el viernes día 13 sus primeros 100 años de vida y, por ello, editará un número especial de 60 páginas a color. En este especial se recogerá, igualmente, lo más destacado de la información que ha aparecido en sus páginas a lo largo de este siglo.
El director y editor de la publicación, Rafael López Ortega, ha explicado que “desde la modestia de estas páginas, que se editan sin ánimo de lucro, estamos luchando para que no muera”, en alusión a La Higuerita. 

De igual modo, cree que la difusión de esta efeméride permitirá que la búsqueda de una solución publicitaria o la creación de una fundación como propone el editor, podrá tener mejor acogida.
Y es que, hasta la fecha, la petición de publicidad institucional no da resultado, por lo que la supervivencia del medio “corre peligro”.


Apuntes sobre La Higuerita

Fue fundado el 13 de febrero de 1915 en Isla Cristina por Juan Bautista Rubio Zamorano -en la foto-, Jaime Casanova Mirabent, F. Cervantes de la Vega, Manuel Bermúdez,  Tomás Berasaluce y Tomás Pérez Roméu, grupo con grandes inquietudes intelectuales que se marcaron como objetivo defender sin ánimo de lucro los intereses generales de la población isleña.


Poco tiempo después, sólo quedó al frente de la publicación como editor y director Juan  Bautista Rubio Zamorano, (Isla Cristina 1887-1968), un idealista hombre de izquierdas, que asumió tal responsabilidad ante las dificultades económicas que algunos socios tenían para seguir con sus aportaciones y también la poca perseverancia que prestaban a la publicación, por lo que desde entonces y hasta su fallecimiento, permaneció en solitario editando y dirigiendo  la misma. Tenía una gran formación autodidacta. Su obsesión era la defensa de los intereses generales de Isla Cristina, por amor a su pueblo.
Su compromiso con Isla Cristina le acompañó hasta sus últimos días, implicándose en multitud de actividades culturales en favor de su pueblo.

A lo largo de su historia, su obra, La Higuerita, sufrió los vaivenes de la política, dado que su línea era consecuente con el pensamiento de su editor. Ya en 1916 fue clausurado por el Ayuntamiento isleño por la hostilidad hacia el mismo al no compartir las decisiones municipales, aunque siguió editándose desde Huelva durante algunos números hasta que se relajó la situación. Durante el periodo de la Guerra Civil 1936-39, Juan Bautista Rubio padeció los rigores de la situación política, hasta el punto de que su vida estuvo en peligro, por lo que tuvo que adaptarse a las circunstancias. Las dificultades  le acompañaron en la posguerra, hasta el punto de que el cupo de papel que oficialmente le tenían asignado para la edición no lo recibía.  El periódico fue sometido a la censura previa hasta aproximadamente el año 1960.
Cuando entra en vigor la Ley de Prensa e Imprenta, el ministro Manuel Fraga Iribarne le exime de la obligatoriedad de tener que estar titulado para ejercer la dirección del periódico al conocer las particularidades de la publicación y el esfuerzo altruista que suponía a su editor la edición.

Durante la posguerra, las dificultades para recibir cupo de papel, obligaba a su editor a imprimirlo en aquel que podía conseguir. Así lo vemos en ocasiones en distinto color o gramaje.

En los años cuarenta,  La Higuerita se convirtió en el decano de la prensa onubense, permaneciendo hasta la fecha publicándose ininterrumpidamente,  Por antigüedad, es el cuarto periódico andaluz, detrás del Diario de Cádiz, El Correo de Andalucía y La Opinión, de Cabra, aunque esta última ha quedado reducida a edición impresa  mensual y digital. 

En sus páginas se encuentran noticias relacionadas con  Blas Infante, redactadas durante su estancia como notario en la ciudad isleña o sobre políticos relevantes de Huelva. Aunque su información básica siempre ha sido la temática local  el periódico está abierto a todo tipo de colaboración literaria, destacándose durante muchos años los escritos del catedrático y filosofo Ángel Rodríguez-Bachiller, otro hombre de izquierdas que sufrió las vicisitudes propias de la situación política a partir de la Guerra Civil.

Al fallecimiento de Juan Bautista Rubio Zamorano, 1968, siguió como editor y director su hijo, Juan Bautista Rubio Milá, que mantuvo la línea de su progenitor y quien en 1985 ante las dificultades económicas para seguir editándolo,  anunció el cierre del periódico en agosto de dicho año. Noticia triste para los muchos isleños repartidos por el mundo que dejarían de recibir la carta semanal de su pueblo como era La Higuerita. Inmediatamente, otro isleño, Rafael López Ortega, residente en Madrid, colaborador periodístico desde los años 50, que mantenía una relación afectiva con la familia de Juan Bautista, y con la colaboración de varios miembros de Radio Isla Cristina en la captación de anunciantes y suscriptores,  se hizo cargo de la cabecera para evitar que desapareciera y asumió la continuidad de la edición, sin ánimo de lucro,  permaneciendo como editor, posteriormente como director, ya que las nuevas tecnologías y un buen equipo de colaboradores que ha ido alternándose desde un principio y hasta la actualidad, le permiten llevarlo desde la distancia física, aunque se obliga a continuos desplazamientos hasta Isla Cristina para seguirlo de cerca, participando activamente de su confección. 
Siguiendo fiel a los principios que guió al fundador del periódico, desde dicha publicación se mantiene y se potencia la actividad cultural isleña, editándose también la colección de libros “Cuadernos de Isla Cristina”, de autores locales, de la que se han publicado siete títulos de temática isleña y en ocasiones organizando o patrocinando conferencias o actividades culturales de  amplia repercusión local.

La edición es de 1500 ejemplares. Isleños o amigos de Isla Cristina en 14 países, muchos de ellos de Europa, forman parte del millar de suscriptores, algunos con una antiguedad de más de 50 años, que en la actualidad tiene La Higuerita, que también se envía a Turquía, Australia, Estados Unidos, y lejanos países donde hay isleños, como también los hay en las distintas comunidades españolas. Desde hace algo cinco años, por estar al día en las nuevas tecnología, tiene también una edición digital en Internet: periodicolahiguerita@hotmail.com, edición que recibe más de 50.000 visitas mensuales y que con su irrupción lamentablemente redujo el número de suscriptores de la edición impresa al ofrecer la información más puntual y gratuita.

Tiene una modesta economía; sus únicos ingresos son las suscripciones y los anunciantes locales, excepcionalmente tiene convenio anual con diputación de Huelva para insertar publicidad fija. No tiene subvención alguna. Ante la crisis de la publicidad, el editor lamenta que habiéndose dirigido a determinado organismo de la Junta hace dos años en petición de publicidad institucional, no se hayan dignado responderle. Tiene más de seis mil lectores.

La carencia de ánimo de lucro por parte del editor y el deseo de perseverar en mantener una parte del patrimonio cultural isleño, permite, aunque con dificultades, seguir publicándose y alcanzar el centenario de su fundación.

Los fondos de hemeroteca de La Higuerita, que guardan un siglo de la Historia de Isla Cristina, es considerada como una importante fuente por investigadores nacionales que acuden a lo largo del año en búsqueda de datos sobre la población o la comarca. En 2013, recogiendo la petición del Ayuntamiento isleño, la Diputación Provincial ha digitalizado sus fondos, que han sido puestos a disposición de cuantos deseen consultarlos. Es propósito del editor donar al Archivo Municipal los fondos de su hemeroteca.

La Higuerita, a lo largo de su dilatada existencia, en muchas ocasiones ha sido reconocida por el Ayuntamiento isleño como la más importante seña de identidad de Isla Cristina, y aunque económicamente no le ha podido ayudar, sí ha tenido reiterados gestos de reconocimiento a su labor dedicándole una calle, el nombre del Centro Cultural Polivalente a su fundador, Juan Bautista Rubio Zamorano y en 2009, dio al nuevo Centro Cultural Municipal el nombre de Rafael López Ortega, su actual editor y director. El 29 de enero de 2015 ha concedido al periódico la Medalla de la Ciudad y ha pedido a la Junta la Medalla de Oro de Andalucía, petición respaldada por miles de firmas y avaladas por el Ayuntamiento y la Diputación de Huelva.

La Asociación de la Prensa de Huelva le otorgó en 2006 el Premio “Ángel Serradilla”. Y la Junta de Andalucía le otorgó en 2009 el Premio Huelva-Junta. En 2013 la Diputación Provincial le concedió la Medalla de Oro de la Provincia.

Su plantilla de colaboradores está formada por unas 10 personas, que mantienen las páginas con informaciones variadas, desde noticias periodísticas locales, información municipal o escritos literarios, hasta las gacetillas que reflejan la vida o sucesos cotidianos de los habitantes isleños. En todos ellos impera un alto sentimiento para que La Higuerita no muera. Desde algunos medios en varias ocasiones se han interesado por la cabecera de La Higuerita, pero su editor no la vende. La mantiene por motivos sentimentales hacia su pueblo y nunca aceptó propuestas de venta, cosa que ha recibido en varias ocasiones. El propósito del editor, que tiene 74 años de edad,  es que en este 2015 pueda crearse una fundación para mantener la publicación, idea apoyada por el Ayuntamiento isleño, la firma conservera local USISA, posiblemente la Diputación de Huelva y una gran entidad provincial de carácter educativo, con la que va a iniciar conversaciones. 

Para festejar que el día 13 de febrero haya cumplido 100 años, se puso en marcha un programa de actividades culturales a realizar durante 2014-2015,tales como una exposición con muchas de sus portadas o noticias, exposición de pintura, la publicación de un libro sobre la historia del periódico, la edición especial de hoy al cumplir 100 años, compuesta por 60 páginas a todo color, inauguración de un mural en la fachada del teatro Horacio Noguera en conmemoración de esta fecha, algunas conferencias a cargo de periodistas significativos, conciertos, actividades deportivas, encuentro de emigrantes isleños procedentes de otras provincias y países, etc. para lo que el editor confía, dada la situación económica propia del medio y del Ayuntamiento, encontrar patrocinadores o la ayuda de Diputación y la Junta.

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