Madrid, 19.06.15.- HBO emitió el pasado domingo el
último capítulo de la quinta temporada de Juego de tronos. El episodio,
titulado Mother's Mercy, fue uno de los más comentados de la temporada, entre
otras razones por la impactante secuencia que protagonizó la actriz Lena Headey,
Cersei Lannister en la ficción.
Y es que, después de pasar días encerrada,
Cersei Lannister decide confesar al Gorrión Supremo que ha mantenido relaciones
sexuales con su primo Lancel. Para expiar sus pecados la Reina Madre es
obligada a realizar el Paseo de la Penitencia, un castigo que consiste en cruzar
desnuda las abarrotadas calles de Desembarco del Rey hasta la Fortaleza Roja
mientras una furiosa muchedumbre de unos 500 extras la insulta y escupe, le
lanza comida e incluso excrementos. Pero el maltratado cuerpo que los
espectadores vieron en la pequeña pantalla no fue el de Headey sino el de su
doble, la actriz Rebecca Van Cleave, que ha contado cómo fue el rodaje de la
impresionante secuencia.
"Ha sido una de las
experiencias más terroríficas, maravillosas y gratificantes que pudiera haber imaginado",
contó Van Cleave a Entertainment Weekly y recoge elmundo.es.
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