Cuentan desde el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) que en Huelva la cosa está muy igualada. De hecho, su encuesta preelectoral otorga a PSOE y PP 2 ó 3 escaños por esta provincia. De todos modos, las últimas encuestas de El País y El Mundo dan mayoría en esta provincial PP mientras que en la de ABC logra la victoria el PSOE. Por tanto, es una incógnita saber hacia dónde se irá el escaño 'bailón'.
Quizá por ello, los candidatos de estos dos partidos a La Moncloa han elegido la provincia más occidental de Andalucía como parada previa al colofón de la campaña, que como es habitual tendrá en Madrid su escenario final. Así, Rajoy ha elegido la Casa Colón de Huelva para dirigirse a los onubenses mientras que Rubalcaba hará lo propio en Punta Umbría.
La contundencia de las encuestas conocidas hasta la fecha dan una clara victoria al PP, lo que ha restado emoción a una anodina campaña en la que unos sonreían sabiéndose ganadores y otros se resignaban a unos datos adversos provocados, sobre todo, por los 5 millones de parados con que se despide Zapatero de la presidencia del Gobierno.
A propósito de dicha victoria, de momento virtual, señala El Confidencial Digital que el PP ha diseñado una estrategia para que su probable triunfo del próximo domingo tenga mayor impacto en Andalucía, de cara a las elecciones autonómicas regionales del próximo año. En la fiesta de Génova habrá multitud de banderas andaluzas. También se ha pedido contención dialéctica y mesura con el alcohol durante la celebración.
La dirección del PP -según la información de ECD- ha transmitido a los miembros del partido que estén presentes en Génova durante la celebración de la victoria varias directrices claras:
En primer lugar, se ha ordenado que ondeen las banderas de todas las comunidades autónomas entre el público. Una en particular, la andaluza. Se espera que este hecho tenga un impacto mediático en la región, que se enfrenta a unas elecciones autonómicas la próxima primavera.
Además, también han pedido moderación en la bebida a todos los dirigentes y militantes. Se quieren evitar declaraciones inoportunas.
Y por último, la dirección de Génova solicita a las bases que mantengan el orden durante la celebración, saben que no les beneficia salir en la televisión celebrando el triunfo como si nunca lo hubieran imaginado” añaden fuentes ‘populares’.
Gritos inoportunos
En Génova no se ha olvidado lo que pasó en la noche electoral de 1996, cuando José María Aznar obtuvo la victoria en las urnas con una ajustada diferencia. Aquella noche se escucharon gritos en la televisión que resultaron molestos a los catalanes: “Pujol enano, habla castellano”.
Tras aquellos incidentes se bloquearon las negociaciones de apoyo, que el PP necesitaba para hacerse con el poder. Hubo que esperar a los Pactos del Majestic para que el Partido Popular formara gobierno, gracias al apoyo de CIU, encabezado entonces por Jordi Pujol. Se quiere, a toda costa, evitar que ocurra algo similar.
Quizá por ello, los candidatos de estos dos partidos a La Moncloa han elegido la provincia más occidental de Andalucía como parada previa al colofón de la campaña, que como es habitual tendrá en Madrid su escenario final. Así, Rajoy ha elegido la Casa Colón de Huelva para dirigirse a los onubenses mientras que Rubalcaba hará lo propio en Punta Umbría.
La contundencia de las encuestas conocidas hasta la fecha dan una clara victoria al PP, lo que ha restado emoción a una anodina campaña en la que unos sonreían sabiéndose ganadores y otros se resignaban a unos datos adversos provocados, sobre todo, por los 5 millones de parados con que se despide Zapatero de la presidencia del Gobierno.
A propósito de dicha victoria, de momento virtual, señala El Confidencial Digital que el PP ha diseñado una estrategia para que su probable triunfo del próximo domingo tenga mayor impacto en Andalucía, de cara a las elecciones autonómicas regionales del próximo año. En la fiesta de Génova habrá multitud de banderas andaluzas. También se ha pedido contención dialéctica y mesura con el alcohol durante la celebración.
La dirección del PP -según la información de ECD- ha transmitido a los miembros del partido que estén presentes en Génova durante la celebración de la victoria varias directrices claras:
En primer lugar, se ha ordenado que ondeen las banderas de todas las comunidades autónomas entre el público. Una en particular, la andaluza. Se espera que este hecho tenga un impacto mediático en la región, que se enfrenta a unas elecciones autonómicas la próxima primavera.
Además, también han pedido moderación en la bebida a todos los dirigentes y militantes. Se quieren evitar declaraciones inoportunas.
Y por último, la dirección de Génova solicita a las bases que mantengan el orden durante la celebración, saben que no les beneficia salir en la televisión celebrando el triunfo como si nunca lo hubieran imaginado” añaden fuentes ‘populares’.
Gritos inoportunos
En Génova no se ha olvidado lo que pasó en la noche electoral de 1996, cuando José María Aznar obtuvo la victoria en las urnas con una ajustada diferencia. Aquella noche se escucharon gritos en la televisión que resultaron molestos a los catalanes: “Pujol enano, habla castellano”.
Tras aquellos incidentes se bloquearon las negociaciones de apoyo, que el PP necesitaba para hacerse con el poder. Hubo que esperar a los Pactos del Majestic para que el Partido Popular formara gobierno, gracias al apoyo de CIU, encabezado entonces por Jordi Pujol. Se quiere, a toda costa, evitar que ocurra algo similar.
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