Después de que la Mancomunidad de Aguas y Servicios 'MAS' haya operado en Lucena del Puerto durante los últimos 30 meses, en el último pleno celebrado en la localidad lucenera, la Corporación municipal ha dado luz verde al abandono del servicio público para optar por la privatización del agua.
Con la oposición del Partido Socialista de la localidad pero con el respaldo de Independientes por Lucena (Ipluc) y Partido Popular, la institución local ya trabaja para gestionar los servicios de abastecimiento, saneamiento, recogida, depuración y tratamiento de aguas, así como el de recogida de residuos sólidos urbanos, según informó Condavisión.
Según el alcalde de Lucena, Manuel Mora, esta operación se justifica por los 'incumplimientos' de MAS con los acuerdos adoptados con el municipio y las tarifas que se cobra a los ciudadanos. Mora recordó que Higuera de la Sierra y Lucena han sido los dos Ayuntamientos que se han opuesto a la subida de tasas, afirmando que MAS “está expoliando a los ciudadanos y descapitalizando a la propia Giahsa”, afirmando además que reparte “más de tres millones de euros que van directamente a los partidos y cargos políticos que integran el organigrama de gestión del ente supramunicipal”.
Así justificó el independiente Manuel Mora la privatización del servicio para lograr una reducción de las tarifas a los ciudadanos.
El pliego de condiciones ya está siendo redactado por el equipo de Gobierno y, como novedad a las otras privatizaciones que se han llevado a cabo en la zona, tendrá un periodo de vigencia máxima de diez años en los que el municipio podría percibir más de 800.000 euros.
Mientas tanto, Giahsa sigue en el centro de enfrentamientos entre diferentes formaciones políticas en la provincia. Así, el coordinador provincial de IU, Pedro Jiménez, ha calificado de "enorme contradicción" que para evitar que los ayuntamientos se marchen de MAS y privaticen el agua, haga esto la propia mancomunidad.
Además, Jiménez ha anunciado el apoyo de IU a la posible huelga que ha convocado el comité de empresa de Giahsa y su rechazo al proceso de privatización "al que se está sometiendo a esta empresa".
Por su lado, el secretario de Organización del PSOE de Huelva, Jesús Ferrera, ha asegurado a Jiménez, que “la prioridad (de su formación y de Giahsa) es defender los puestos de trabajos y la calidad del servicio público del agua en la provincia”.
En este sentido, Ferrera sugirió a Izquierda Unida que en lugar de poner “zancadillas” cuando hay dificultades “debería ponerse del lado de los trabajadores, al igual que ser coherente con el pacto que firmó”.
Asimismo, el secretario de Organización onubense pidió a Jiménez que diga “claramente cuáles son las preferencias de su partido, porque si el PP e IU abandonan el proyecto y a sus trabajadores, el PSOE seguirá defendiendo, en solitario, los puestos de trabajos y un servicio público de calidad para todos los ciudadanos de la provincia”.
Por ello, Ferrera lamentó que en este momento Izquierda Unida no actúe con “lealtad, ni intente dar soluciones a la situación”. Una prueba de “irresponsabilidad” de dicha formación está en que en los municipios donde han estado gobernando o gobiernan en coalición se optó por la gestión privada para el agua, con la empresa Aqualia.
Con la oposición del Partido Socialista de la localidad pero con el respaldo de Independientes por Lucena (Ipluc) y Partido Popular, la institución local ya trabaja para gestionar los servicios de abastecimiento, saneamiento, recogida, depuración y tratamiento de aguas, así como el de recogida de residuos sólidos urbanos, según informó Condavisión.
Según el alcalde de Lucena, Manuel Mora, esta operación se justifica por los 'incumplimientos' de MAS con los acuerdos adoptados con el municipio y las tarifas que se cobra a los ciudadanos. Mora recordó que Higuera de la Sierra y Lucena han sido los dos Ayuntamientos que se han opuesto a la subida de tasas, afirmando que MAS “está expoliando a los ciudadanos y descapitalizando a la propia Giahsa”, afirmando además que reparte “más de tres millones de euros que van directamente a los partidos y cargos políticos que integran el organigrama de gestión del ente supramunicipal”.
Así justificó el independiente Manuel Mora la privatización del servicio para lograr una reducción de las tarifas a los ciudadanos.
El pliego de condiciones ya está siendo redactado por el equipo de Gobierno y, como novedad a las otras privatizaciones que se han llevado a cabo en la zona, tendrá un periodo de vigencia máxima de diez años en los que el municipio podría percibir más de 800.000 euros.
Mientas tanto, Giahsa sigue en el centro de enfrentamientos entre diferentes formaciones políticas en la provincia. Así, el coordinador provincial de IU, Pedro Jiménez, ha calificado de "enorme contradicción" que para evitar que los ayuntamientos se marchen de MAS y privaticen el agua, haga esto la propia mancomunidad.
Además, Jiménez ha anunciado el apoyo de IU a la posible huelga que ha convocado el comité de empresa de Giahsa y su rechazo al proceso de privatización "al que se está sometiendo a esta empresa".
Por su lado, el secretario de Organización del PSOE de Huelva, Jesús Ferrera, ha asegurado a Jiménez, que “la prioridad (de su formación y de Giahsa) es defender los puestos de trabajos y la calidad del servicio público del agua en la provincia”.
En este sentido, Ferrera sugirió a Izquierda Unida que en lugar de poner “zancadillas” cuando hay dificultades “debería ponerse del lado de los trabajadores, al igual que ser coherente con el pacto que firmó”.
Asimismo, el secretario de Organización onubense pidió a Jiménez que diga “claramente cuáles son las preferencias de su partido, porque si el PP e IU abandonan el proyecto y a sus trabajadores, el PSOE seguirá defendiendo, en solitario, los puestos de trabajos y un servicio público de calidad para todos los ciudadanos de la provincia”.
Por ello, Ferrera lamentó que en este momento Izquierda Unida no actúe con “lealtad, ni intente dar soluciones a la situación”. Una prueba de “irresponsabilidad” de dicha formación está en que en los municipios donde han estado gobernando o gobiernan en coalición se optó por la gestión privada para el agua, con la empresa Aqualia.
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